Guía práctica para elegir muebles de calidad en decoración de interiores

En este artículo descubrirás cómo comprar muebles con un simple vistazo, valorando tanto el diseño como la calidad de cada pieza. Aprenderás a analizar sofás, sillas, mesas e incluso colchones, para que cada elección contribuya a un hogar cómodo y con estilo.


1. El sofá: la pieza clave de tu salón

1.1. Medidas y plazas

Un sofá es una de las mayores inversiones en decoración, tanto por su coste como por su importancia estética. En las tiendas, suelen describirse según el número de asientos, pero puede resultar confuso: “tres almohadones” no siempre equivale a tres plazas.

Para salir de dudas, lo mejor es recurrir al metro:

  • Mide la distancia entre los dos reposabrazos.
  • Calcula unos 60 cm de ancho por persona.

Por ejemplo, si tu sofá mide 1,90 m de reposabrazos a reposabrazos, dispondrás de tres plazas cómodas.

1.2. Comodidad y firmeza

El borde anterior del cojín debe ser algo más blando para favorecer la comodidad, mientras que la parte posterior debe ser más firme, proporcionando el soporte adecuado. En modelos muy baratos, esta diferencia de firmeza puede ser casi imperceptible o incluso inexistente, lo que provoca que el relleno acabe cediendo y deformándose con el uso.

1.3. Armazón y muelles

Para comprobar la solidez del armazón:

  1. Sujeta una de las patas delanteras.
  2. Levanta el sofá unos centímetros.
  3. Observa si la pata delantera contraria se alza también.

Si se eleva, el armazón está bien construido. Si, por el contrario, permanece en el suelo, significa que la estructura cede en algún punto.

Además, pregunta si el sofá lleva muelles. Los modelos más económicos suelen limitarse a cojines de espuma sobre la estructura, sin muelles. Los de mejor calidad incluyen sistemas de muelles en la base que añaden resistencia y prolongan la vida útil del sofá.


2. Cómo elegir sillas cómodas y funcionales

2.1. Profundidad y altura del asiento

Para asegurar que la silla sea cómoda:

  • Profundidad adecuada: el asiento no debe ser demasiado profundo (las piernas no deben quedar colgando) ni demasiado corto (no concentrar el peso solo en las piernas). Lo ideal es que el borde del asiento quede un poco antes del pliegue de las rodillas.
  • Altura recomendada: oscila entre 42 y 45 cm. Más baja, dificultará levantarse; más alta, se parecerá más a un taburete y no encajará correctamente debajo de la mesa.

2.2. Respaldo y estabilidad

Un respaldo ligeramente inclinado ofrece mayor confort que uno completamente vertical. Además, un respaldo muy bajo no brinda el apoyo adecuado, mientras que uno demasiado alto puede obstaculizar la movilidad de la cabeza.

Respecto a las patas:

  • Patas rectas: son más propensas a tambalearse ante empujones laterales.
  • Patas inclinadas: mejoran la estabilidad al repartir mejor el peso.

2.3. Peso y perspectiva en fotos

Una silla debería ser suficientemente ligera para moverla con facilidad, pero con el peso necesario para ofrecer estabilidad. Al comprar online, revisa las fotos desde diferentes ángulos, ya que con frecuencia se muestran solo de frente o de lado, pero en casa solemos verla por detrás cuando está junto a la mesa.


3. Mesas: dimensiones y resistencia

3.1. Estructura y robustez

Una mesa se compone del tablero (o sobre) y la estructura (o marco) que lo sostiene. Para comprobar su solidez, empuja ligeramente un extremo y observa cuánto tarda en dejar de vibrar. Cuanto antes se estabilice, más sólida será.

3.2. Medidas para comer con comodidad

Calcula unos 60 cm de ancho por persona y entre 35 y 40 cm de fondo. Por ejemplo, para cuatro personas:

  • Mesa rectangular mínima de 130 x 70 cm.
  • Idealmente, de 80-90 cm de fondo para poder colocar fuentes o jarrones.

Recuerda además dejar 70-80 cm desde la pared o mueble más cercano, con el fin de poder sentarte y levantarte sin tropiezos.


4. El colchón: factor determinante para un buen descanso

4.1. Altura del colchón

La altura estándar de la cama se suele situar en torno a los 55 cm desde el suelo, lo que facilita subir, bajar y cambiar sábanas. Sin embargo, algunas personas prefieren camas más bajas, especialmente si se sientan en el borde para vestirse o si no pueden flexionarse con facilidad. En ese caso, una altura de 45 cm (similar a la de una silla) puede resultar más cómoda.

4.2. Tipos de muelles y firmeza

  • Muelles sencillos (bonel): los tradicionales que pueden producir ruidos con el uso prolongado.
  • Muelles ensacados: cada muelle se encuentra dentro de una pequeña bolsa, mejorando la independencia de lechos y la comodidad.
  • Zonas diferenciadas: distribuyen la firmeza en función de la presión que ejerce el cuerpo.

La firmeza depende mucho de la persona. Un truco es fijarse en la facilidad para cambiar de postura:

  • Si para darte la vuelta necesitas muchas maniobras, es que el colchón es demasiado blando.
  • Si te despiertas con dolores y rigidez, probablemente es demasiado duro.

Elegir muebles de calidad no es tan complicado si se conocen los criterios esenciales: medir el espacio disponible, comprobar la solidez de las estructuras, analizar la firmeza del asiento o colchón, y asegurarse de que cada pieza se ajuste a las necesidades de confort y uso diario. Con estos consejos, podrás tomar decisiones más informadas y disfrutar de un hogar funcional y bien decorado.

Si quieres profundizar en cada apartado (tipos de rellenos, tests de resistencia de tejidos, diferencias entre camas, armarios o estanterías), mantente atento a próximos artículos. ¡Tu casa agradecerá cada elección bien pensada!