Guía completa para revisar antes de comprar una vivienda: evita sorpresas y asegura tu inversión

Ana Blanco Vigo -

Comprar una vivienda es una de las decisiones más importantes de nuestra vida. Además de la ilusión por estrenar un nuevo hogar y las posibilidades de reforma y decoración que ofrece, es fundamental realizar una serie de comprobaciones previas para asegurarnos de que todo está en orden antes de firmar. Si pasamos por alto ciertos aspectos, podríamos encontrarnos con problemas posteriores que afecten tanto a la estética y funcionalidad del inmueble, como a nuestro bolsillo.

En este artículo, encontrarás una guía completa con todos los pasos que debes seguir, desde la solicitud de documentación legal hasta la revisión del estado de la comunidad de vecinos, para que puedas realizar una compra segura y libre de imprevistos. Además, veremos la importancia de adaptar la vivienda a tus gustos, las posibilidades de reforma y la necesidad de entender las normas de la comunidad, con el objetivo de crear un hogar confortable y bien integrado en su entorno.

Antes de entregar cualquier cantidad de dinero en concepto de señal o reserva, es vital revisar la nota simple de la propiedad. Este documento, emitido por el Registro de la Propiedad, detalla:

  • Titularidad de la vivienda: debes confirmar que la persona que vende es la propietaria legal.
  • Cargas: como hipotecas, embargos o limitaciones (por ejemplo, si es una vivienda protegida o tiene algún tipo de gravamen).
  • Elementos adicionales: si se incluyen garaje, trastero u otros espacios, verificar también su situación registral.

Si la propiedad procede de una herencia, es fundamental comprobar que la transmisión está correctamente tramitada y que los herederos figuran legalmente como propietarios.

Consejo: Condiciona siempre la entrega de la reserva y las arras a la revisión satisfactoria de la nota simple, incluyendo una cláusula que permita anular la operación en caso de que se detecten irregularidades.

Revisión de la comunidad de propietarios

Solicita las últimas actas de la comunidad (al menos las dos o tres últimas reuniones). Esto te permitirá:

  • Conocer si existe una derrama aprobada o prevista para reformas importantes (fachadas, ascensor, electricidad, tejado).
  • Detectar problemas vecinales o conflictos internos.
  • Verificar el coeficiente de participación de la vivienda en los gastos comunes.

Además, pide los estatutos de la comunidad para saber si existen condiciones particulares sobre el uso de espacios comunes, trasteros compartidos o zonas exteriores.

Comprobar suministros y servicios

Asegúrate de que la vivienda se entrega con los suministros dados de alta, especialmente la electricidad. Si el edificio tiene instalaciones eléctricas antiguas y sin actualizar, dar de alta un nuevo contrato podría suponer un gran coste y retrasos considerables.

  • Revisa también el estado del agua, gas y telecomunicaciones.
  • Si planeas una reforma, contar con los suministros activos desde el primer día facilitará el trabajo a los profesionales.

Inspecciones técnicas y normativa

Antes de firmar, comprueba si el edificio ha pasado la Inspección Técnica del Edificio (ITE) o la Inspección de Evaluación del Edificio (IEE). Esto es crucial para conocer el estado estructural, las instalaciones comunes y las posibles mejoras obligatorias.

En caso de que haya obras pendientes o derramas aprobadas para subsanar deficiencias, deberás valorar estos aspectos a la hora de negociar el precio o planificar tus reformas de decoración y rehabilitación.

Hipoteca, asesoría financiera y trámites con notaría

Si vas a financiar la compra con una hipoteca, contar con la ayuda de un asesor financiero puede resultar muy útil. Este profesional te guiará en la búsqueda de las mejores condiciones, ahorrándote tiempo y dinero.

En cuanto a la notaría, asegúrate de disponer de:

  • Certificado de deuda cero de la comunidad, demostrando que la vivienda no tiene impagos con el vecindario.
  • Certificado energético: un documento obligatorio, aunque muchas veces solo se entrega la etiqueta. Solicita el informe completo, pues será útil si más adelante alquilas la vivienda.
  • Borrador de la escritura: revísalo antes de la firma, comprobando nombres, porcentajes de participación, precios y métodos de pago.

Detalles finales antes de la firma

Pide al vendedor las últimas facturas de los suministros para facilitar el cambio de titularidad. Además, es recomendable conseguir el contacto del administrador de la finca o el presidente de la comunidad, de modo que puedas gestionar rápidamente el alta en la comunidad y las futuras derramas.

Por último, exige la entrega de todas las llaves y mandos disponibles. Aun así, plantéate cambiar el bombín de la puerta principal nada más adquirir la vivienda, ya que nunca sabrás cuántas personas han tenido acceso a las llaves con anterioridad.

Pensando en reformas y decoración

Una vez hayas comprobado todos los aspectos legales, económicos y técnicos, llega el momento de pensar en cómo adaptar la vivienda a tus gustos. Si la casa necesita reformas, es aconsejable:

  • Solicitar varios presupuestos a empresas especializadas en reformas integrales.
  • Revisar las normas de la comunidad para comprobar qué obras están permitidas (por ejemplo, cerrar una terraza o hacer cambios en la fachada puede estar limitado).
  • Consultar con profesionales de decoración para optimizar los espacios, la iluminación y la distribución, creando un hogar cómodo, funcional y estéticamente agradable.

Recuerda que pequeños cambios decorativos, una nueva pintura o la elección de mobiliario acorde a tus gustos y necesidades, pueden transformar por completo el ambiente del hogar.

La compra de una vivienda no se limita a elegir una propiedad y firmar un contrato. Requiere una revisión exhaustiva de documentos, la confirmación del estado del edificio, la negociación de condiciones y la comprobación de suministros y normas comunitarias. Si sigues todos estos pasos, minimizarás las sorpresas desagradables y podrás centrarte en lo realmente importante: personalizar tu nuevo hogar y disfrutarlo al máximo.

Cada proceso de compraventa es único y, con el tiempo, siempre surgen anécdotas y aprendizajes. Si consideras que existe algún punto adicional que no hayamos comentado, no dudes en compartir tu experiencia. Tu aportación puede resultar muy valiosa para otros compradores.

¡Gracias por leer y mucha suerte con la búsqueda de tu próxima vivienda!