Salamandras y estufas a leña - ¿Qué debes saber antes de comprar una?

Las salamandras y estufas a leña son una opción muy popular para calentar el hogar, sobre todo en zonas donde el gas natural no llega o es muy caro. Sin embargo, no todas las estufas son iguales y hay que tener en cuenta varios aspectos antes de elegir la más adecuada para tu casa. En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre las ventajas y desventajas de las salamandras y estufas a leña, los tipos de materiales, las formas de calentamiento y los consejos de uso y mantenimiento.

¿Qué son las salamandras y estufas a leña?

Son aparatos que generan calor a partir de la combustión de madera dentro de una cámara cerrada. Su instalación no requiere demasiadas obras, solo la perforación de una salida de humos por el techo o por la pared.

Este tipo de estufas tienen un funcionamiento bastante sencillo y económico, ya que la leña es un combustible renovable y barato si lo puedes encontrar cerca. Además, crean una atmósfera acogedora y rústica en el hogar, con el sonido y el aroma de la leña quemándose. Sin embargo, también tienen algunos inconvenientes, como la emisión de humo y cenizas, el espacio que ocupan y el riesgo de incendio si no se toman las medidas de seguridad adecuadas.

¿Qué tipos de materiales hay para las salamandras y estufas a leña?

Las más conocidas están fabricadas en dos tipos de materiales: por un lado, el acero y por el otro, el hierro fundido. Cada uno tiene sus ventajas y desventajas, y hay que elegir el que mejor se adapte a tus necesidades y gustos.

Estufas de acero

Las estufas de acero son las más económicas y ligeras. Están fabricadas en chapas de acero. Esto hace que se calienten mucho más rápido, pero también que pierdan la temperatura más rápidamente cuando se apaguen. La mayoría de ellas suele tener por dentro un recubrimiento de ladrillos refractarios que ayuda a conservar un poco más el calor para después entregarlo al ambiente.

También pueden ser de una sola combustión o de doble combustión. Las de una sola combustión solo queman la leña y tienen un rendimiento menor, de alrededor del 50%. Las de doble combustión aprovechan el poder calorífico de los gases que se generan en una primera combustión y obtienen así un mejor rendimiento que puede llegar hasta el 80%. A mayor rendimiento, menor consumo de leña y menor emisión de humo.

Estufas de hierro fundido

Las estufas de hierro fundido son más caras y pesadas que las de acero, pero también tienen mejores prestaciones. El hierro fundido es un material que tiene mucha inercia térmica, lo que significa que tarda más en calentarse, pero luego aguanta mucho más el calor, sobre todo una vez que se apaga. Por lo tanto, tiene un calor residual muy alto que se mantiene durante horas.

Las estufas de hierro fundido emiten un calor directo y radiante que calienta mucho el ambiente. Por lo tanto, hay que tener ciertos cuidados con la distancia que se debe mantener entre la estufa y los objetos, como el mobiliario, y las personas, para evitar quemaduras o incendios. Además, las estufas de hierro fundido destacan por su estética, ya que tienen un aspecto rústico y tradicional que contribuye a crear una atmósfera especial en el hogar. En muchos casos, se insertan dentro de un hueco de antiguas chimeneas, sobre todo en casas de campo.

Estufas de ladrillo

Además de las estufas de acero y de hierro fundido, hay otro tipo de material que se usa para las estufas a leña: el ladrillo. Son los típicos y tradicionales hogares a leña. El ladrillo tiene el poder de conservar más el calor y entregarlo de forma más uniforme al ambiente.

Además, tienen un valor estético propio de los hogares a leña, con su diseño clásico y elegante, sin embargo, construir una estufa de ladrillo requiere de obra y una cierta complejidad.

¿Qué formas de calentamiento hay para las salamandras y estufas a leña?

Las salamandras y estufas a leña pueden calentar el ambiente por dos formas distintas: por radiación o por convección. Cada una tiene sus ventajas y desventajas, y hay que elegir la que mejor se adapte a tus necesidades.

Calentamiento por radiación

El calentamiento por radiación es el que se produce cuando la estufa emite ondas de calor que se transmiten directamente a los objetos y personas que están cerca. Es un calor intenso y focalizado, que se siente más en la zona frontal de la estufa. Este tipo de calentamiento es el que ofrecen las estufas de hierro fundido y las de ladrillo.

  • Las ventajas del calentamiento por radiación son que se siente el calor de forma inmediata y que no depende del aire para propagarse.
  • Las desventajas son que se pierde mucho calor por las paredes y el techo, que se calienta solo una parte del ambiente y que se necesita una mayor distancia de seguridad entre la estufa y los objetos y personas.

Calentamiento por convección

El calentamiento por convección es el que se produce cuando la estufa calienta el aire que está en contacto con ella y lo hace circular por el ambiente. Es un calor más suave y homogéneo, que se distribuye por todo el espacio. Este tipo de calentamiento es el que ofrecen las estufas de acero y algunas de hierro fundido que tienen un sistema de convección.

  • Las ventajas del calentamiento por convección son que se aprovecha mejor el calor, que se calienta todo el ambiente y que se necesita una menor distancia de seguridad entre la estufa y los objetos y personas.
  • Las desventajas son que se tarda más en sentir el calor y que depende del aire para propagarse.

Instalación y seguridad

Es crucial considerar la ubicación de este tipo de estufas para maximizar su eficiencia y seguridad. Deben instalarse en un lugar central, manteniendo una distancia segura de los materiales inflamables y con un soporte adecuado para el peso y el calor.


Las estufas a leña ofrecen una alternativa eficiente y ecológica para la calefacción de espacios. Al elegir la adecuada, considera el material, el rendimiento, y las necesidades específicas de tu hogar. Con la instalación y el uso correctos, una estufa a leña puede ser una excelente fuente de calor y un elemento estético en tu hogar.

Ventajas 👍

  • Sostenibilidad: La leña es una fuente de energía renovable.
  • Costo-Eficiencia: Generalmente más económica que otros combustibles.
  • Estética y Calidez: Aportan un ambiente acogedor y rústico.

Desventajas 👎

  • Mantenimiento: Requieren atención regular y limpieza.
  • Consumo de Leña: Necesidad de almacenamiento y logística.
  • Emisión de Humo: Puede ser un inconveniente en espacios cerrados.