¿Qué tipo de ducha elegir? Guía práctica para acertar con tu elección

Ducharnos con agua calentita es uno de esos pequeños placeres de los que todos disfrutamos. Puede ser un buen principio del día o un momento de relax antes de irnos a dormir. Por eso, elegir el tipo de ducha adecuado no es una tarea fácil, ya que hay muchos factores a tener en cuenta.
En este artículo explicaremos todos los tipos de duchas diferentes que existen para que puedas decidir cual se adapta mejor a tus necesidades.

Tipos de ducha según el sistema de instalación

El sistema de instalación se refiere a la forma en que se coloca la tubería y el grifo en el baño. Según este criterio, podemos distinguir entre dos tipos:

Duchas empotradas

Las duchas empotradas son aquellas que se instalan en la pared, ocultando la tubería y el grifo. Este tipo de ducha tiene un aspecto más moderno y minimalista, y permite aprovechar mejor el espacio del baño. Además, facilita la limpieza y el mantenimiento, ya que no hay elementos visibles que puedan acumular suciedad o cal.

No obstante, las duchas empotradas también tienen algunos inconvenientes. Por un lado, requieren una obra más compleja y costosa, ya que hay que abrir la pared para instalar la tubería y el grifo. Por otro lado, en caso de avería o fuga, es más difícil acceder al interior de la pared para repararla.

Duchas externas

Las duchas externas son aquellas que se instalan sobre la pared, dejando a la vista la tubería y el grifo. Este tipo de ducha tiene un aspecto más clásico y tradicional, y permite una instalación más sencilla y económica, ya que no requiere obra. Además, en caso de avería o fuga, es más fácil acceder a la tubería y el grifo para solucionarla.

Sin embargo, las duchas externas también tienen algunos inconvenientes. Por un lado, ocupan más espacio en el baño y pueden restar estética al conjunto.

Dentro de las duchas externas, nos encontramos muchos tipos, pero sin duda las más de moda son las columnas multifunción, incluso con hidromasajes. Estas, tienen una columna con varios rociadores que emiten chorros de agua a presión sobre diferentes zonas del cuerpo. Este tipo de ducha ofrece una sensación más placentera y terapéutica, ya que ayuda a relajar los músculos, estimular la circulación y aliviar el estrés. Además, suelen incorporar otras funciones como la cromoterapia, la aromaterapia, la radio o la pantalla táctil .

Tipos de ducha según el tipo de rociador

El tipo de rociador se refiere a la pieza que emite el agua sobre el cuerpo. Según este criterio, podemos distinguir entre dos tipos:

Duchas fijas

Las duchas fijas son aquellas que tienen un rociador fijo en la pared o en el techo, que no se puede mover ni orientar. Este tipo de ducha ofrece una sensación más envolvente y relajante, ya que simula una lluvia natural. Además, suelen tener un diseño más elegante y sofisticado, que aporta un toque de distinción al baño.

No obstante, las duchas fijas también tienen algunos inconvenientes. Por un lado, limitan la movilidad y la comodidad del usuario, ya que no se puede ajustar el ángulo ni la altura del rociador. Por otro lado, consumen más agua y energía, ya que suelen tener un caudal mayor y una temperatura más alta.

Duchas móviles

Las duchas móviles son aquellas que tienen un rociador móvil en un soporte o una barra deslizante, que se puede mover y orientar según se desee. Este tipo de ducha ofrece una mayor versatilidad y funcionalidad, ya que permite adaptar el rociador a las necesidades y preferencias del usuario. Además, suelen tener un diseño más práctico y sencillo, que facilita su uso y limpieza.

Muchas veces, es normal encontrar columnas que cuentan con estos dos tipos a la vez, por lo que no tendremos que elegirnos por una u otra.


Como hemos visto, existen diferentes tipos de ducha según el sistema de instalación o el tipo de rociador. Cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes, por lo que la elección dependerá del gusto, el presupuesto y el espacio de cada uno.