Cocina con isla en colores claros y oscuros

Eliminar olores de la cocina: Extractores, purificadores y trucos que SÍ funcionan

15 de sep. de 2025

Cuando cocinamos, especialmente con aceites y grasas, liberamos partículas microscópicas: gotitas de grasa, vapor con compuestos orgánicos y restos de hollín. Estas partículas se adhieren a telas y paredes, creando esa persistente sensación de olor impregnado.

Soluciones tradicionales: ¿Extractor o purificador?

Extractores

Extraen el aire viciado al exterior. Son muy efectivos si están bien instalados, con conductos de ventilación adecuados (preferiblemente de 15 cm de diámetro) y pocos codos (mejor si son de 45º en lugar de 90º para evitar pérdidas de eficiencia). Si vives en un piso sin salida al exterior, no te servirá de mucho.

Purificadores

Aspiran el aire, lo filtran y lo devuelven a la cocina. Ayudan, pero no eliminan los olores por completo. Requieren un mantenimiento regular (cambio de filtros) para no convertirse en un simple adorno.

En resumen, si puedes instalar un extractor con salida al exterior, es la mejor opción. Si no, un purificador es mejor que nada, pero no esperes milagros.

Claves para elegir bien

Extractores

  • Potencia: Lo más importante es la cantidad de metros cúbicos de aire por hora que puede mover.
  • Conductos: Evita los conductos demasiado estrechos y los codos pronunciados.

Purificadores

  • Filtros de grasa: Límpialos regularmente para que no se saturen.
  • Filtros de carbón activado: Reemplázalos cada pocos meses, aunque suelen ser caros.

¿Qué hay de nuevo en el mercado?

Constantemente aparecen nuevos filtros, purificadores futuristas y campanas extractoras que prometen eliminar todos los olores. Sin embargo, la mayoría solo suavizan los olores. Los modelos más modernos, como los que se integran en la encimera, suelen ser caros y no rinden tanto como prometen. Sirven como complemento, pero no son la solución definitiva. Lo esencial sigue siendo lo mismo: si puedes sacar el aire al exterior, un buen extractor es la mejor opción.

Soluciones arquitectónicas: más allá de los aparatos

Antes, la cocina estaba cerrada para contener los olores. Ahora, buscamos espacios integrados, lo que dificulta el control de los olores. Algunas soluciones son:

  • Ventilación cruzada: Abre puertas y ventanas opuestas para crear corrientes de aire. Es básico, pero efectivo.
  • Cocina secundaria o de apoyo: Integra una zona para cocinar con olores fuertes en el lavadero o en un espacio semiabierto.

Trucos caseros: ¿funcionan?

  • Hervir agua con limón o vinagre.
  • Dejar café molido o bicarbonato cerca de la hornalla.
  • Encender velas aromáticas o incienso.

Estos trucos pueden ayudar a disimular los olores, pero no los eliminan. Son parches, no soluciones reales. Puedes combinarlos con ventilación o un extractor para mejorar el efecto.


Los olores de la cocina no desaparecen por arte de magia. Podemos atenuarlos, pero siempre estarán presentes. Cocinar en casa tiene su costo, y parte de ese costo son los olores. Lo demás son formas de aprender a convivir con ellos.

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