10 trucos sencillos para hacer mas bonito tu hogar al instante
¿Te has preguntado alguna vez cómo dar un aire renovado a tu casa sin meterte en grandes reformas? En este artículo descubrirás diez trucos eficaces y muy sencillos para conseguirlo. Desde jugar con la distribución de los muebles hasta aprovechar pequeños detalles decorativos que solemos pasar por alto. ¡Toma nota y verás cómo tu hogar cambia al instante!
1. Introduce tres elementos iguales separados entre sí
Normalmente, cuando hablamos de la regla de los impares, pensamos en colocar tres objetos juntos, pero en este caso haremos lo contrario. El truco consiste en elegir tres piezas iguales, por ejemplo, tres plantas idénticas o tres objetos decorativos del mismo color, y distribuirlos por la estancia, separados entre sí. De este modo, el ojo recorrerá la habitación de un punto a otro, creando sensación de armonía.
Consejo:
- No importa si son plantas, jarrones o cojines del mismo color. Lo importante es que se repita la misma forma o tonalidad en tres puntos distintos de la habitación.
2. Coloca un mueble en diagonal
Casi todos los muebles suelen ir alineados con las paredes, pero si colocas uno de ellos en diagonal (puede ser una butaca, una mesita auxiliar o una lámpara de pie), romperás la monotonía de las líneas rectas y darás más dinamismo a la estancia. Este recurso se utiliza mucho en estilismo editorial para que, al ver la escena, resulte más atractiva e interesante.
Consejo:
- Prueba con una butaca pequeña o una mesilla en diagonal. Aporta un efecto sorprendente y convierte la sala en un espacio más dinámico.
3. Invierte en recipientes rellenables
En la cocina y el baño es muy común acumular envases de plástico o frascos de distintas marcas. Sustituirlos por recipientes rellenables que sean acordes a tu estilo decorativo es un gesto sencillo que proporciona orden y elegancia. Además, crearás un efecto visual más coherente y agradable.
Ideas:
- Usa dispensadores de jabón uniformes para el baño.
- Elige botes similares para sal, azúcar, pasta o cereales en la cocina.
4. Añade bandejas y cuencos
¿Tienes varios objetos repartidos por una mesa o una consola? Colocarlos sobre una bandeja o un cuenco hace que el conjunto se vea más organizado y decorativo. Este gesto tan sencillo evita la sensación de desorden y, al mismo tiempo, aporta un toque estiloso a la superficie.
Alternativa:
- Si no dispones de una bandeja, un libro bonito puede servirte de base para agrupar objetos. Así lo tendrás a mano y crearás también un punto de interés muy decorativo.
5. Atrévete con los contrastes
A veces, nos gusta tanto un estilo que terminamos decorando toda la casa de la misma forma: todo nórdico, todo clásico, todo madera... Para romper ese efecto monocorde, introduce un objeto que contraste. Por ejemplo, si tu casa es de estilo nórdico, prueba a colocar un cuadro muy moderno o un mueble vintage que actúe como pieza protagonista. El contraste añade vida y riqueza visual.
Ejemplo práctico:
- Si tienes un salón con tonos neutros, introduce un sillón en un color intenso o un objeto de estilo diferente. Esta pequeña licencia marcará la diferencia.
6. Unifica con un elemento repetido
En el lado opuesto, si en casa tienes un popurrí de objetos de distintos estilos y colores, sentirás que a veces falta cohesión. Una forma de ordenar ese batiburrillo es introducir un conjunto de piezas iguales: cojines del mismo tono, marcos de fotos idénticos o varios jarrones a juego. Esta repetición crea un hilo conductor y suaviza la mezcla de estilos.
7. Enmarca tus cuadros o láminas
Un lienzo sin enmarcar suele dar la sensación de que “falta algo”. Enmarcarlo eleva la pieza y la hace lucir mucho más. Además, un buen marco aporta un remate decorativo que potencia el cuadro y lo integra mejor en el ambiente.
Recuerda:
- El marco correcto puede ser clásico, minimalista o con personalidad propia. Lo importante es que esté acorde con la obra y con el conjunto de la habitación.
8. Decora la mesa de centro
La mesa de centro es uno de los puntos focales del salón. No la dejes vacía: coloca un jarrón, una bandeja con libros, un centro de mesa con flores o incluso algún objeto que te guste. Verás cómo así aportas carácter al espacio y dejas de tener la sensación de sala “desnuda”.
Sugerencias:
- Apuesta por elementos fáciles de mover si necesitas despejarla con rapidez.
- Mezcla piezas de diferentes alturas para que la composición sea más atractiva.
9. Muestra alguna antigüedad
Incluir un objeto antiguo o una pieza con solera (cerámica, un mueble heredado, un espejo….) aporta carácter y una historia única a la decoración. Coloca esa pieza sobre un mueble nuevo o en una estantería y conseguirás un contraste con mucho encanto.
Idea:
- Si no sabes dónde poner ese objeto con valor sentimental, busca un rincón especial para él y conviértelo en el protagonista de una composición original.
10. Elige las bombillas adecuadas
La iluminación influye directamente en cómo percibimos el espacio. Ajustar la temperatura de color de las bombillas es fundamental. Aunque cada estancia necesite una potencia distinta, procura que las bombillas de salón, comedor, pasillos y dormitorios tengan la misma temperatura (entre 2.600 y 3.000 Kelvin) para lograr una luz más armónica. En cocinas y baños, puedes optar por bombillas de 4.000 a 5.000 Kelvin para una iluminación más blanca y práctica.
Con estos diez trucos verás cómo tu casa cambia de forma inmediata sin necesidad de embarcarte en reformas costosas. Pequeños gestos, como colocar un mueble en diagonal, agrupar objetos en una bandeja o unificar la temperatura de las bombillas, transforman por completo el ambiente y hacen que tu hogar luzca más armonioso y atractivo. ¡Ponlos en práctica y disfruta de un espacio que te haga sentir a gusto cada día!